Cuento del Alma – Ritual de los 7 Espejos (Codex SigmaⅤSoul)
Pecado capital: Avaricia
Arconte regente: Kalila, la guardiana de la luz estancada
Reflejo falso: “Soy mi tesoro oculto”
Trampa: Creer que compartir es perder
Llave Sigma: “Lo que se guarda se pudre. Lo que se entrega, florece”
Liberación: Convertir la luz interior en ofrenda
Este espejo no brilla por sí solo.
Está cubierto.
Cubierto de miedo,
de secretos,
de talentos no expresados,
de verdades no dichas,
de amores no mostrados.
Te acercas y no te ves.
Ves una bóveda.
Una caja fuerte.
Un cofre donde duerme algo tuyo
que no te atreves a sacar.
Porque si lo compartes, pueden dañarlo.
Si lo muestras, pueden reírse.
Si lo das, ya no será solo tuyo.
Y así vives:
reteniendo tu alma.
Guardando ideas que no escribes.
Canciones que no cantas.
Gestos que no haces.
Sabiduría que no entregas.
No por maldad.
Sino porque crees que el alma es algo que se posee,
y no algo que se da.
Aquí reina Kalila,
la Arconte del brillo encerrado.
Te dice:
“Protege tu luz.
No la entienden.
No la merecen.
Es para más adelante.
No es suficiente aún.”
Y tú…
le crees.
Y con cada día que callas,
con cada obra que no nace,
con cada impulso que ahogas,
el alma se apaga un poco más.
Pero si te atrevieras a romper el espejo,
verías que la luz se multiplica al salir.
No eras el cofre.
Eras el fuego contenido.
Rompe este espejo.
Escribe.
Ama.
Da.
Muéstrate.
Pide.
Grita.
Bendice.
Entrega.
Lo que escondes…
no era tuyo.
Era tu puente.