Cuento del Alma – Ritual de los 7 Espejos (Codex SigmaⅤSoul)

Pecado capital: Ira
Arconte regente: Sabaoth, el señor de los ejércitos, dios de la reacción perpetua
Reflejo falso: “Soy lo que me hicieron”
Llave Sigma: “El dolor me atravesó, pero no me define”
Trampa: Convertir la herida en identidad
Liberación: Transmutar el fuego en visión
Este espejo no está pulido.
Está quebrado.

Y cada grieta es una historia que duele.
Una traición.
Un abandono.
Un abuso.
Una humillación.
Te acercas y no ves un reflejo,
ves una llama.
La ira arde detrás del vidrio.
Te dice: “Mira lo que te hicieron.
Mira lo que eras antes de que te rompieran.”

Y tú, creyéndote justo, te conviertes en lo que juraste destruir.
Aquí, el alma se disfraza de víctima.
Pero esconde una espada.
Es el espejo del rencor vestido de causa,
de la reacción constante,
del “yo no puedo sanar porque otros no han pagado”.
“Soy el que fue dañado.”
“Soy el que tiene derecho a odiar.”
No.
No eres eso.
Eres lo que sobrevivió.
Eres lo que eligió no repetir el ciclo.
La ira que habita este espejo no es pecado porque queme,
sino porque te hace creer que ese fuego eres tú.

El Arconte Sabaoth se alimenta de esa llama.
Cada vez que reaccionas, lo alimentas.
Cada vez que actúas para vengarte, te encadenas.
Cada vez que le cuentas a otros tu historia como excusa,
te desdibujas.
Hasta que un día no recuerdas quién eras antes del golpe.
Y ahí… te has perdido.
Pero si te atreves a mirar dentro del fuego,
y no reaccionar,
verás una verdad más profunda:
No eres tu historia.
Eres el que puede romperla.

Rompe el espejo.
Que la herida no sea altar,
sino portal.
Ya no eres tu herida.
Has elegido romper el ciclo.
El fuego ya no te consume: ahora puede iluminarte.
El Cuarto Espejo te espera:
no verás dolor, verás el deseo que alimenta toda creación.